Un cuento magnífico por la intensidad de los personajes y la realidad
académica tan conocida. Una verdadera joyita. Adelante!
Me parece especial, y poco común; me demuestra que vivimos en un mundo en que lo principal es el aspecto exterior y que en pocas veces le dan valor a la esencia, lo que me hace pensar que es triste perder esta esencia. Si la autora hubiese terminado arrojando al personaje y que apareciera bella pero muerta a la orilla del río solo hubiese demostrado lo que ya dije antes. LO QUE EN REALIDAD IMPORTA ES LA ESENCIA HUMANA, ESA QUE CADA DIA ESTA PERDIENDO VALOR.
Francis Mejías, francismejías@latinmail.com
Originalmente me parecio una historia pero se luego entendi que era un cuento y como tal tenia algunos matices de verdad , que crei que era yo!, pues la belleza d e los seres humanos verdaderamente esta en el interior.
Muchas gracias por escribirlo.A proposito tiene mi mismo nombre
Hortencia S. USA
El cuento de Hortencia, me parecio, extraordinariamente real, si muy semejante aunque pareciera q quien lo escribió conocía incluso cada lugar recóndito del personaje, cuando lo leí tiene ese forma de escribir que causa curiosidad y yo si soy curiosa, si existe algo interesante así como esa lectura si la leo sobre todo sus ojos verdes me imagino que eran realmente lindos, y eso del ajenjo y la miel, me hace estremecer por que yo sé hasta cuanto una persona puede contener esos dos ingredientes en el corazón mas q en la barriga.
Marcela Vázquez Ortega
Toluca, México.